martes, 14 de agosto de 2012

LA MEMORIA AJENA



EL VENGADOR DEL FUTURO
(Total Recall)
2012. Dir. Len Wiseman.

            A finales del siglo XXI existe la Federación Unida de Britania (que incluye a Europa, Asia y parte de África) y la Colonia (Australia) como lugares donde todavía se puede existir aunque sea de manera aglomerada. Hay un transporte desde la FUB hasta la Colonia por un medio subterráneo. Ahí van los empleados de fábricas. Está la resistencia contra el gobierno ya que se quejan de la explotación en la Colonia. Uno de estos obreros, Douglas (Colin Farrell) tiene extraños sueños donde es perseguido y atrapado, dejando atrás a una mujer que aparentemente ama. Su esposa Lori, quien trabaja en la policía (Kate Beckinsale) lo consuela y le dice que no es nada de temer. Cierto día, Douglas escucha de “Rekall” que promete la implantación de una memoria ajena, recuerdos a la medida. Douglas va a dicho lugar y expresa su deseo de una memoria como agente secreto: al ser intervenido con el aparato consiguiente, ocurre una situación que evita la continuación del proceso ya que se descubre que en realidad era un agente secreto cuyo cerebro había sido ya alimentado con una falsa realidad. El hombre se da cuenta que ha estado viviendo una existencia ajena. Su esposa se encargará de querer eliminarlo: el hombre recuperará a su antigua amada, la que aparecía en sueños (Jessica Biel).


            Quienes hayan visto la cinta previa, con mismo título en inglés y español, encontrarán diferencias en el argumento, aunque el punto de partida sea la misma de un cuento corto de Philip K. Dick (“Podemos recordarlo por Ud. al mayoreo”, que apenas tiene once páginas). Estamos, entonces, ante una relectura donde cambian las circunstancias. La cinta original (interpretada por Schwarzenegger en 1990, dirigido por el maestro Paul Verhoeven) mostraba al héroe viajando hasta Marte para acabar con una conspiración contra el planeta; en este caso, Douglas permanecerá en la tierra para acabar con la dictadura y la explotación laboral. En 1990, Douglas descubría el engaño del implante de sus falsos recuerdos debido al ataque que recibía de su mujer (Sharon Stone, antes del estrellato por mostrar su genitalia en Bajos instintos) para viajar hasta el planeta rojo. En esta cinta, Lori tiene mayor importancia: se convierte en la enemiga principal del que considera un traidor, con el cual ha tenido que vivir un engaño conyugal.

            El cuento original narra cómo Douglas, agente secreto, busca que se le implante una fantasía infantil (cómo salvó al planeta de los marcianos por medio de un pacto) que había sido verdadera. Al querer adquirirla, recuperaba la memoria y no podía ser eliminado porque entonces los marcianos aniquilarían al planeta. Estamos lejos en ambas versiones fílmicas de esta trama. La de 1990 todavía involucraba a Marte; la relectura se centra en la carga política y en la imagen apocalíptica de un planeta que ya se ha extinguido en parte. La lucha entre débiles y poderosos se asemeja a tantas otras cintas donde se denotan las fuertes diferencias sociales (hasta en el género de terror con zombis, como pasa en Tierra de los muertos de Romero).

            Sin embargo, la cinta se centra en la acción: en la rivalidad entre sexos que puede tomarse como venganza represiva (la tensión sexual está omnipresente: sobre todo en los enfrentamientos de cuerpos). El realizador Wiseman vuelve a los personajes fuertes femeninos. La hermosa Kate Beckinsale 
fue una sobreviviente entre vampiros y licántropos en sus primeras dos cintas de Inframundo (Wiseman, 2003 y 2006). Luego fue Maggie Q. como la villana casi indestructible de la ejemplar Duro de matar 4.0 (Wiseman, 2007). No es casual la sustitución de identidades que se vive al final de la cinta como hemos podido disfrutarlo desde los inicios de la película. Tampoco que uno de los guionistas también trabajara en esa película con Wiseman, un realizador inteligente.

Colin Farrell está en su mejor momento físico.
la bella Jessica Biel ha ido demostrando que no es una mera presencia.
siempre he alabado la hermosura de la Beckinsale. Así que estamos en una cinta donde el trío principal está conformado por gente atractiva. Algo que llama mucho la atención es la dirección artística y los efectos especiales. La atmósfera es oscura, denotando frustración y amargura: lo logra con creces. Otro discurso interno contra fascismo y poder. Una cinta que te va absorbiendo poco a poco hasta envolverte. Gran ejemplo de lo que significa la intertextualidad en el cine.