LA
LLEGADA
(Arrival)
2016.
Dir. Denis Villeneuve
LA
CHICA DEL TREN
(The
Girl On the Train)
2016.
Dir. Tate Taylor
1.- LA LLEGADA
Han
llegado doce naves extraterrestres a sendos lugares del planeta. En Estados
Unidos sucede en Montana hacia donde es trasladada la Dra. Louise Banks (Amy
Adams), eximia lingüista, junto con el físico Ian Donnelly (Jeremy Renner) para
buscar la manera de comunicarse con los seres que han llegado. Previamente
hemos sido enterados que Louise ha tenido una bebé que luego creció y falleció.
Durante el proceso, Louise va descifrando los signos (algo que también se
intenta desde los otros países que tienen a estos huéspedes) hasta que logra
enterarse de las intenciones de los visitantes.
Con
esta base argumental estamos ante un acercamiento intelectual dentro de la
ciencia ficción que propone al lenguaje como uno de los grandes dones que puede
poseer la humanidad para llegar al entendimiento. La disertación sobre la
comunicación y los sentidos diversos que las palabras pueden adquirir. De esta
manera también el hombre puede apropiarse del tiempo y llegar hasta la visión
del futuro. Lo más importante es aceptar el destino que nos ha tocado vivir
aunque nos traiga situaciones difíciles. No puede comentarse nada preciso sin
echar a perder el punto clave de esta extraordinaria película que no se regodea en el efecto especial buscando llegar al cerebro y no a la panza del espectador. El juego temporal de la narración la torna singular. Simplemente es otra joya del
realizador de cintas soberbias como La
mujer que cantaba, Intriga, Enemigos idénticos, Sicario y ahora esta obra maestra.
2.- LA
CHICA DEL TREN
Todo lo
contrario debe decirse de la fallidísima adaptación de esta novela bestseller a la pantalla grande. La
historia de Rachel, una dipsómana (Emily Blunt), que vive frustrada por el
fracaso matrimonial y acosa a su ex marido y a la nueva esposa. Rachel pasa
todos los días por el tren que la lleva a la ciudad frente a su antiguo hogar
(donde ahora sigue habitando el ex marido). Dos casas abajo vive una pareja a
la cual ha idealizado porque la considera ejemplo perfecto. Cierto día se da
cuenta que la mujer se está besando con otro hombre. Esto la lleva, estando
alcoholizada, a bajar del tren, perseguirla para gritarle que es una perdida,
pero entonces sufre un accidente del cual no recuerda nada. A los pocos días
sale la noticia de que ha desaparecido la joven mujer. Ella empezará a
entrometerse para llegar a una inesperada solución.
La novela
original mantenía un juego de tiempos que retrocedían de manera distinta según
la protagonista femenina de la que se estaba hablando. El suspenso era gradual
y la atención se mantenía por esta razón. En pantalla todo resulta lento, un
terrible sentido del ritmo, y se va resolviendo de manera simple sin que se
sostenga, ni se sienta, esa angustia existencial de Rachel, ni su obsesión por
la pareja inicial que daría lugar al desencadenamiento de coincidencias. El
realizador Tate Taylor nos había dado previamente Historias cruzadas (2011), otra trama basada en una novela popular,
aunque mucho más trivial, donde destacaba el reparto (Viola Davis, Octavia
Spencer, Emma Stone). En este caso sucede lo mismo con Emily Blunt, cuya presencia
es fuerte, aunque se sienta desperdiciada.