domingo, 1 de febrero de 2015

BÚSQUEDA IMPLACABLE 3
(Taken 3)
2014. Dir. Olivier Megaton.


         Sin el ritmo vertiginoso de las primeras dos cintas donde había el secuestro de la hija (película original) en Francia, y de la ex esposa (primera secuela) en Turquía, para que las buscara su padre y ex esposo respectivamente, el ex agente especial de la CIA, Bryan Mills (Liam Neeson, en el inicio de una segunda carrera como héroe de películas de acción), ahora se enfrenta con la acusación de que ha asesinado a la ex esposa, cuando todo ha sido una perversa maquinación. Logra escapar de la policía e iniciar esa búsqueda. Ahora no hay secuestro, simplemente la necesidad de cerrar un ciclo iniciado exitosamente en 2008 por el productor Luc Besson.

El versátil Liam Neeson ya había demostrado su talento
como actor en muchas otras cintas: ahora se divierte (y sigue siendo excelente)


         La cinta se dedica primero a establecer a las tribulaciones de familia: la ex esposa recurre a Mills para confesarle que ya ha perdido la ilusión en su segundo matrimonio y quiere abandonar a su esposo. La hija, ya estudiante universitaria, que vive en su propio departamento con su pareja, descubre que está embarazada y no sabe si abortar o seguir adelante. Antes de ello, hemos visto cómo un tipo asesina al contador de un empresario que le debe dinero. Esas son las dos premisas para que se desarrolle una trama interesante en Los Ángeles. Ya no es un país extranjero sino la propia tierra de Mills.

Famke Janssen aparece poco tiempo como la ex esposa del agente Mills


         Entonces, aparece muerta la ex esposa en su propio departamento. En este momento, se conecta la trama con los antecedentes en cuanto empezará esa “búsqueda” que promete el título en español. En inglés, Mills es quien será “tomado” (Taken) por el autor intelectual del asunto. Y de esta manera habrá una serie de inteligentes complicaciones para llegar a la consecución de la verdad, dejándonos a los espectadores con toda la libertad poética del género de acción, para explicar la continuidad de los hechos.

Mills, padre amoroso, ha hecho todo por la familia, y aquí
se encuentra con su hija (Maggie Grace)


         La cinta está construida con personajes redondos: el malvado Malankov (el excelente y feísimo Sam Spruell) cuyas finalidades están bien definidas y resulta ser un simple intermediario; el enigmático y contradictorio Stuart St. John (el maravilloso Dougray Scott) quien es el segundo esposo de la mujer; y sobre todo, el inspector Dotzler, un hombre inteligente que sabe interpretar las posibles jugadas y reacciones del astuto Mills (un actor fuera de serie como es Forest Whitaker).

Dougray Scott
Sam Spruell
Forest Whitaker

         Búsqueda implacable 3 fue denostada por la “crítica” en general. Se deja de lado que el antecedente de esta cinta fue precisamente el amor hacia la familia. En un ambiente de fantasía se sublima lo que cualquier persona normal haría, si tuviera estas increíbles habilidades, por proteger a sus seres queridos. Dentro de toda la violencia prevista e inevitable que se derrochará en las tramas, los malvados recibirán su merecido: el cuento moral se vuelve triunfante. Por otro lado, como mencionaba anteriormente, está la poética de la violencia: hay reglas, hay circunstancias, hay consecuencias entre ambos lados de la ley. Esta serie de cintas ha establecido una visión del estado en que se encuentra el mundo: secuestros, trata de personas, venganzas de raza por los genocidios contemporáneos donde no se sabe quién tiene la razón (o sea, la visión de los vencidos ante los dudosos vencedores) y, más que nada, el motivo detrás de todo: la riqueza, el poder, la necesidad de tenerlo todo cuando no se tuvo nada (de ahí que los nuevos ricos o neopoderosos se mareen ante sus posibilidades).


El enfrentamiento con Malankov descubre otros planes perversos


         No es la primera ocasión que se tratan estos asuntos ni será la última vez: es la forma en que se adecuan a los tiempos cambiantes y muestran la realidad en que estamos sumergidos. Ritmo y secuencia: grandes cualidades de esta película con la cual se cierra una brillante trilogía. Olivier Megaton confirma su estatus de realizador que maneja la violencia de manera razonable: no hay sangre por sangre.

Olivier Megaton durante la filmación con Liam Neeson



Nota: en este blog pueden encontrar mis comentarios sobre Búsqueda implacable y Búsqueda implacable 2.