DEADPOOL
2016. Dir.
Tim Miller.
Wade Wilson (Ryan Reynolds,
simpatiquísimo) es un golpeador a sueldo que conoce a Vanessa (la brasileña Morena
Baccarin) de la cual se enamora perdidamente. De pronto, descubre que tiene
cáncer terminal. Aparece un tipo que le ofrece la cura a la enfermedad por lo
que una noche abandona a Vanessa y se interna en un lugar sombrío donde un
sociópata Ajax / Francis (Ed Skrein, quien estuviera en la subestimada El transportador recargado) es quien lo
somete a tratamiento que remediará su enfermedad pero lo convertirá en
superesclavo para trabajar como mercenario, por ejemplo. En una de las etapas,
Wade queda sin oxígeno y su cuerpo entero adquiere una textura seca, manchada,
con estrías. Logra escapar y lo que esperará será reencontrar a Ajax para que
lo devuelva a su estado inicial.
Ryan Reynolds resulta simpatiquísimo y muestra su versatilidad
que tanto lo lleva a ser dirigido por Atom Egoyan o ser héroe de película
Todo lo que le acabo de contar es
lineal, aunque la cinta está estructurada de otra manera: inicia con la
búsqueda de Ajax y luego, con diversos retrocesos en el tiempo, el héroe, ahora
llamado Deadpool narra su vida
previa, su amorío, su enfermedad, hasta llegar a este punto nuevamente, mostrando
lo inteligente del guion. No queda cabo suelto y se van cubriendo antecedentes,
hechos y consecuencias. Todos los personajes tienen razón de ser y nada sobra,
nada falta.
Morena Baccarin es Vanessa
Hay que destacar que Deadpool es otro personaje de Marvel
pero resulta malhablado, sensual (toda una secuencia de variantes en la cama) y
hasta ambiguo en su sexualidad (Vanessa lo somete analmente y Wade alaba el
trasero de Wolverine). Y se agradece
que se hayan permitido la libertad de presentar desnudos, palabrotas y dobles
sentidos, sin que importara la violencia o tener que ser correctos
políticamente. Al personaje no le importan ciegos o negros y su falta de
compasión se extiende hasta a los mismos personajes mutantes que lo conectan
con la otra serie de X-Men. Los
diálogos juegan sin solemnidad con los estereotipos del género, se mencionan a
otras cintas y personajes y se va desenvolviendo la trama de manera natural,
clara, amena. Viene a ser el equivalente a Ant-Man (2015, Peyton Reed), del año
pasado, donde sin elencos estelares ni inmensas inversiones económicas, se alcanza
un cine extremadamente divertido, con una trama simple de duración normal.
El sociópata Ajax (Ed Skrein)
La película vuelve a hablarnos del
héroe, aquel que utiliza sus poderes para el bien del prójimo, pero no lo canoniza
ni torna en ser perfecto. El discurso es muy violento y obviamente está la
lucha del bien contra el mal, aunque con un giro delicioso que tiene humor y un
reparto de gran simpatía (incluye al comediante T.J. Miller que usualmente
presta su voz para cintas animadas o la legendaria cantante Leslie Uggams, como
una ciega cocainómana y hasta la campeona de artes marciales Gina Carano). Deadpool viene a ser la primera gran
película de entretenimiento masivo del 2016. Extraordinaria.
Tim Miller en su ópera prima como director