miércoles, 5 de septiembre de 2018

LA ACCIÓN IRRESISTIBLE


MILLA 22: EL ESCAPE
(Mile 22)
2018. Dir. Peter Berg.



         Durante los créditos de esta vigorosa película nos vamos enterando de las características físicas y psicológicas de James Silva (Mark Wahlberg) quien fuera hiperactivo, impulsivo, excelente militar al grado de alcanzar un estado  mánico-depresivo. Previamente hemos sido testigos de una misión donde la CIA, a través de un programa denominado Overwatch (tan sofisticado que todo lo maneja desde satélites que se introducen hasta los esqueletos de una casa) pudo eliminar a espías rusos. Silva, en un momento límite, mata a un jovencito que estaba dentro del predio. Pasan 16 meses y la acción pasa a un país imaginario en el sureste asiático. Se andan buscando cinco contenedores de Cesio-139, polvo radiactivo que puede exterminar fácilmente a poblaciones enteras. Llega un ex policía, Li Noor (el indonesio Iko Uwais), buscado por su propio país, que busca asilo en la embajada norteamericana a cambio de dar información sobre el lugar donde se encuentra este peligroso material. No obstante, todo lo tiene encriptado en un disco que se autodestruirá en cierto tiempo. Para dar la contraseña exige que lo trasladen a Estados Unidos. Aquí inicia toda una odisea para que Noor sea transportado hasta el avión que lo llevará al exilio. 
Mark Wahlberg en su
cuarta cinta con el realizador Berg

         Con ecos de otras cintas semejantes donde deben saltarse obstáculos para que una persona requerida por ser criminal (El tren de las 3:10 a Yuma, Daves 1957), objeto de esperanza (Niños del hombre, Cuarón 2006) o mero testigo de cargo (16 calles, Donner 2006), llegue a su destino para que se cumpla la justicia, en esta variante se tiene a un personaje que ofrece suspicacias por las condiciones chantajistas, pero debe ser apoyado por cuestiones de seguridad mundial. Este es el motivo por el cual debe volver a intervenir Overwatch cuya razón de ser se equipara con las acciones de la saga de Misión imposible donde el gobierno se desliga de responsabilidades debido a que se salta todas las convenciones legales para acceder a sus intervenciones sobre las soberanías nacionales o los derechos individuales.

Lauren Cohan,
la implacable Alice

         Es interesante el estilo narrativo donde el personaje de James se exalta, expresa sus inseguridades o enojos, alargando y matizando los momentos de acción. Nos lleva al complemento de la personalidad de Silva quien resulta ser el más redondo de los seres que pueblan esta ficción (aunque lo mismo puede decirse de la implacable agente Alice, interpretada por la actriz Lauren Cohan de la famosa serie The Walking Dead, cuya vida personal la lleva a una encrucijada emocional: sacrificar su deber maternal por servir a su patria). Otra curiosidad es que se pone en jaque a la esperada hegemonía norteamericana: todo el discurso implica la revolución y el avance tecnológico más refinado, pero en esta ocasión, en esos afortunados giros narrativos, el espectador logra sorprenderse.

Iko Uwais, toda una revelación

         La acción no da tregua: hay destrucción constante y acechanzas en cada esquina. Aún dentro de la embajada suceden enfrentamientos súbitos e imprevistos que ofrecen otra visión de vulnerabilidad que llegará a su pico máximo al término de la película. Debe destacarse el excelente ritmo: la cinta dura apenas 90 minutos y así pasan rápidamente para el espectador al cual no se le da tiempo de respiro. Y se destaca la personalidad y magnetismo de Iko Uwais, anteriormente doble de cine, actor en algunas cintas, pero cuya presencia se impone: uno no puede dejar de admirarlo. Viene a representar lo que sucede con la película entera: parece común y corriente pero termina siendo irresistible.

El director Peter Berg,
especialista en cine de acción